En el libro (que mescla amor y locura) “Veronika decide morir” de Paulo Coelho
Se encuentra el siguiente cuento:
"Un poderoso hechicero, queriendo destruir un reino, coloco una poción mágica en un pozo de agua del que todos sus habitantes bebían.
Quien tomase de aquélla agua se volvería loco.A la mañana siguiente toda la población bebió y todos enloquecieron, menos el Rey y su familia que tenían un poso privado, donde el hechicero no había logrado entrar.
El monarca preocupado, intento controlar a la población ordenando ciertas medidas de salud publica, pero los policías e inspectores también habían enloquecido y estos decidieron no respetar las disposiciones reales porque las creían absurdas.
Cuando los habitantes de aquel reino se enteraron de las medidas que el rey había dispuesto, quedaron convencidos de que el monarca había enloquecido y por eso disponía cosas sin sentido.
A la mañana siguiente le pidieron que renuncie.
Desesperado el rey se manifestó dispuesto a dejar el trono, pero la reina lo impidió diciendo:
"Vallamos ahora hasta la fuente y bebamos de ella también, así seremos iguales a ellos."
Así se hizo, el Rey y la Reina bebieron del agua de la locura y comenzaron a decir cosas sin sentido. Al momento los súbditos se arrepintieron, ya que el Rey estaba mostrando cierta sabiduría.
¿Por qué no dejarle gobernar?
El país siguió en calma, aunque los vecinos se comportasen de forma diferente.
El Rey pudo gobernar hasta el resto de sus días."
¿Se puede entonces decidir quien esta loco y quien no?
Para el Rey de esta historia los habitantes estaban dementes…
Pero para ellos era el Rey el que estaba delirando
¿Quién lo hacia?
¿Podemos decir nosotros que estamos cuerdos?
Y las personas que nosotros consideramos locos…
¿Que dirán de nosotros?
¿No pensaran ellos también que somos nosotros los que estamos mal de la cabeza?
Muy cierto el dicho:
“Cada loco con su tema”
